Roman y Lucy son dos personas que viven en una pequeña y helada ciudad del Archipiélago Ártico Canadiense. Él huye de su pasado, mientras que ella está más preocupada por lo que ofrece el presente y anhela regresar a la civilización para volver a la universidad. En ese inhóspito lugar, duele más su bagaje emocional que el frío que congela sus huesos.