Los sistemas de seguridad de los tres lugares más seguros de Inglaterra son burlados casi a la vez. Sólo hay una persona que podría haberlo hecho: Jim Moriarty. Pero algo no encaja… ¿Por qué no ha robado nada? ¿Por qué se ha dejado atrapar por la policía? Parece claro: el verdadero objetivo de Moriarty es la caída definitiva de Sherlock Holmes.