El primer caso de Shark tras su vuelta a la oficina del fiscal gira en torno al asesinato de una joven cantante tras abandonar una fiesta en la mansión Playboy de Hugh Hefner. El principal sospechoso de su muerte es su productor, famoso por su peculiar trato con las jóvenes promesas femeninas. Danny pondrá en peligro el caso y su propia carrera cuando su relación con el testigo estrella del caso se torne en algo muy personal.