El cuerpo de un hombre aparece sobre el montacargas de un edificio en construcción. El equipo acude a la escena, donde se encuentra el pasaporte de la víctima, que no coincide con los datos de su carnet de conducir. En un descuido, el pasaporte desaparece y un miembro del NCIS consigue ver al ladrón, que le apunta con una pistola. La declaración y las pistas que pueda ofrecer serán la clave para esclarecer quién es verdaderamente la víctima y quién se empeña en borrar su rastro.