Tras irse del infierno, Lucifer Morningstar se retira a Los Angeles en busca de una vida más emocionante. Cuando el asesinate de un amigo le conecta con la detective de la policía Chloe Decker, a Lucifer le intriga la idea de castigar criminales, enviando al diablo en sí en una lucha interna entre el bien y el mal.